Me había prometido no hablar en este curso más que de condados como el de Faulkner. También pensaba hablar –otro año será– de aquella película en la que Burt Lancaster va de piscina en piscina: “¡Hoy es el día en que Ned Merril atraviesa a nado el condado!”. Pero pese a empezar bien, ya estoy por donde solía: hablando de caciques locales como los del condado de Rodezno. La culpa no es sólo mía: alguna tiene el Tribunal Administrativo de Navarra (TAN). Rodezno hijo –aquel al que Pamplona dedicara en los nacionalcatólicos años 50 la plaza Conde de Rodezno–, según declaraba a la prensa del Burgo padre –Jaime del Burgo– en los años 90, no era de fiar. Era –siempre según del Burgo padre– un animal político, no precisamente en el sentido aristotélico del término, sino en el mal sentido: en el sentido de animal maquinador y traicionero. Rodezno hijo podía haber fundado la Asociación de Terratenientes de Navarra –de inequívoca y muy beligerante vocación caciquil–, estar implicado en el fallido golpe militar de 1932, tener un papel protagonista en el de 1936 o uno muy principal en la depuración franquista, pero para gente como del Burgo padre, la política le había “liberalizado” –léase “liberal” en el sentido despectivo que el término tiene para un tradicionalista o un integrista: en el sentido de pervertido o echado a perder– y “distanciado del espíritu de su padre”, padre al que también ahora va dedicada en Pamplona la plaza que antes sólo disfrutaba el hijo. Pues si Rodezno hijo –el séptimo conde– era algo liberal, cómo sería Rodezno padre –el sexto conde–, nada sospecho de ese pecado. Cómo sería aquel detentador de las auténticas esencias de la tradición, amén de portaestandarte del espíritu verdadero, al que de poco a aquí Pamplona también rinde homenaje, merced a la burla de Barcina y la burocrática aquiescencia del juez del TAN que, al no entrar a juzgar el espíritu de la burla, consagra que queden honrados en el callejero Rodezno hijo, Rodezno padre y su santo espíritu.

Más y mejor en Vivir de buena gana.

Publicado en Diario de Noticiasdn